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Ruta 8 días

DESDE TANGER

Tanger - Marrakech

Excursión de 8 días al desierto Erg Chebbi desde Tánger pasando por las ciudades imperiales

ITINERARIO DE LA RUTA POR DÍAS

Día 1

Rumbo a Chefchaouen

Aquí comienza nuestra andadura para conocer un poquito de Marruecos. Nos reuniremos por primera vez en el sitio que acordemos (hotel, aeropuerto…) y tras las previas presentaciones y conocer los detalles de la ruta, pondremos rumbo directamente hacia Chefchaouen pasando por Tetuán.

Ya sabemos que Chaouen se sitúa al noroeste del país y que pertenece a la provincia de Tánger. La ciudad se levanta sobre las montañas más bajas de la cordillera del Rif, cerca de Tetuán. Fue fundada por una tribu bereber, quienes consagraron la ciudad como santuario y cerraron la entrada a toda persona extranjera, aunque después Chaouen fue casa de diversas culturas: exiliados de Andalucía, musulmanes, judíos sefardíes, cristianos… Impresiona el flujo cultural que ha tenido esta tierra que a primera instancia uno no lo imagina siquiera.

No sabríamos decir si esta ciudad es de las más bonitas, pero sí que tiene una energía única. A mí personalmente me recuerda mucho a lo que se siente estando en Granada, para quienes la conozcáis.

Chaouen se presenta vestida de azul, familiar, tranquila y se nota que está levantada con cariño, pues hasta en el mínimo rincón hay un detalle. Te va a llamar la atención la exposición de diversos productos textiles expuestos por toda la medina; colores vivos e intensos que contrastan con el tono azul característico de la ciudad. Y esto se debe a que su principal fuente de ingresos proviene de aquí, de la artesanía en telares, lanas y cuero o también de la carpintería o de la forja de hierro.

La medina no rompe con la armonía del lugar y es también tranquila, pequeñita. Se puede acceder a ella por 5 puertas diferentes y es muy recomendable dejarte llevar para conocer lo que te llame la atención. Al final todas las direcciones te llevarán al mismo sitio: la Plaza Uta el-Hammam. Un sitio para sentarse y contemplar el día a día de sus habitantes, admirar la Gran Mezquita y la Kasbah.

Un poquito más hacia delante está la Plaza de Makhazen, más al norte y sale hacia la fuente Ras el-Maa, uno de los sitios más entrañables de Chaouen. Aquí es típico que las mujeres estén lavando sus ropas o ver el funcionamiento de los molinos de agua. Y por este bonito camino llegamos al conocido barrio de los lavaderos hasta volver hacia la parte baja de la ciudad. En verdad hay mil opciones que elijas la que elijas te va a gustar.

En cuanto a sus habitantes, aquí te vas a encontrar con personas amables, educadas, que respetan mucho su entorno y muestran un gran aprecio por la impresionante naturaleza que les rodea: paisajes impresionantes, ríos, bosques de cedros y abetos o su diversa fauna; como el conocido mono del Rif, que su presencia se hace latente en muchas de las rutas senderistas y en parajes de interés turístico donde se muestra sin ningún estupor.

Saliendo y alejándonos un poquito de la ciudad y adentrándonos en los pueblos de los alrededores observamos que reinan todavía las costumbres tradicionales y las actividades que realizan se hacen de forma manual, como en la producción de alfarería que aún se sigue haciendo en hornos de leña.

La verdad que todo lo que escribamos se queda corto, porque de verdad, todo lo que leas se triplica cuando lo vivas en persona.

Día 2

Meknes y Fez

Amanece un nuevo día y hoy la jornada acaba en Fez. Por lo quedan unos cuantos kilómetros por delante. Antes de llegar a Fez pasaremos por Meknes, otra de las cuatro ciudades imperiales y la menos turística del país magrebí; quizá por eso sea tan acogedora. Se presenta un día largo, así que después del desayuno saldremos lo antes posible rumbo a Meknes, pues.

Esta ciudad se encuentra ubicada en la Cordillera del Rif marroquí y fue fundada por los bereberes. Es mundialmente conocida por su oro gastronómico: el aceite de oliva y la fertilidad de sus tierras, ya que utilizan una técnica muy particular de fertilización llamada Fertirriego. Esta técnica aprovecha los sistemas de riego para aplicar los nutrientes necesarios que van directamente a las raíces.

Bien, pues mientras nos adentramos en sus calles al fondo se ve perfectamente la montaña Zerhoun, justo al norte de la ciudad, y a sus pies el conocido pueblo sagrado Moulay Idriss, que se encuentra a unos 25 km de Meknes. En ese pueblo está el santuario de Idrís I, fundador de la Dinastía Idrisí, que fue la primera dinastía islámica en establecerse en el Magreb. Seguiremos esta dirección después de visitar otros puntos de interés patrimonial como la Medrassa (centro institucional que enseña el Islam) Bouanania, los zocos, el Museo de Dar Jamai, la plaza El Hedim, muy conocida por su parentesco a la plaza Jamaa El Fna de Marrakech o la conocida puerta de Meknes, Bab Mansour que mide unos 16 metros de altitud. La verdad es muy, muy bonita y no le falta detalle.

Observarás que la gente de Meknes es agradable y amable, muy acorde con el ambiente que les rodea. Es una ciudad poco transcurrida, hace una temperatura agradable y sus alrededores son verdes, campos de diversos cultivos, de amapolas u otras flores silvestres. La ciudad está muy bien cuidada, tanto el casco viejo como la zona nueva.

Tras conocer un poquito de Meknes seguimos rumbo hacia Fez. Llegaremos ya entrada la noche, justos para la cena, descansar y reponer fuerzas para el día siguiente, que se avisa: es bastante movidito.

Día 3

Día exclusivo para Fez

Hoy vamos a desayunar fuerte porque os espera vivir uno de los días más intensos y estimulantes, puesto que Fez es de las ciudades más transcurridas de Marruecos y conocer su medina, te aseguro, va a ser toda una hazaña.

Fez es la más antigua de las ciudades imperiales, capital religiosa del país y segunda ciudad más turística de Marruecos y declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está considerada un museo al aire libre. Fez es una ciudad rica en cultura que une el patrimonio antiguo con el moderno y que además cuenta con la medina más grande del mundo.

Dedicaremos un día (y nos quedamos cortos) para poder explorar sus antiguos zocos, callejones estrechos, mezquitas antiguas, alminares imponentes y visitar la cooperativa de la cerámica y la curtiduría, todo un espectáculo para la vista.

Hoy va a ser un día movidito, por lo que a media tarde volveremos a nuestro riad donde pasaremos la noche. Podéis aprovechar el tiempo como queráis, si queréis cenar por vuestra cuenta, descansar, pasear… Fez está a vuestra disposición.

Día 4

Azrou, Valle del Ziz, Erfoud y Merzouga

Amanece en Fez y nos ponemos en marcha para poner rumbo a nuestra meta de hoy: Merzouga. Nos quedan por delante casi 400 km, así que desayunamos bien temprano y arrancamos la marcha. Antes de llegar haremos varias paradas. Así que prestad atención porque vais a ver el giro de 360 de contrastes que hay cruzando el Atlas Medio.

A primera hora de la mañana saldremos dirección Ifrane, conocida por ser la Suiza marroquí no solo por su clima frío, sino también por su urbanismo de estilo centroeuropeo occidental. Seguiremos hacia Azrou, famoso por su artesanía en alfombras, sus bosques de cedros y sus simpáticos habitantes: los monos de Gibraltar. Dentro de la ciudad está la pequeña medina con tiendas y talleres de artesanía muy interesantes.

Continuaremos la marcha dirección Merzouga y haremos parada para comer en medio de las montañas del Atlas, en Midelt, considerado punto céntrico comercial de todo el territorio agrícola de la zona.

Ya queda menos para llegar a nuestra meta, pero antes todavía nos quedan unas paraditas: una en Errachidia y otra en Erfoud. Pero antes de llegar a estas paradas, seguiremos camino atravesando el Valle del Ziz. Contemplaremos la ciudad de Oued Ziz, del mismo Valle del Ziz, repleta de un largo palmeral que se extiende a lo largo de todo el río. Una maravilla, de verdad, pues a causa de sus bosques de palmeras datileras apiñadas entre sí da la apariencia de un manto verde intenso que se extiende entre la aridez. También veremos algunas de las cuevas que se encuentran en los acantilados donde algunas se encuentran habitadas por algunas familias.

Cuando estemos más próximos a Errachidia, haremos la parada para ver la presa Hassan Addakhil, que abastece de agua a todas las regiones de Errachidia. Tiene una gran extensión de agua donde la mayoría de su agua almacenada procede del río Ziz, que entra y sale de la presa. Las gentes de la zona suelen bañarse cuando aprietan los días calurosos y la verdad, son aguas cristalinas y cálidas.

Y la última parada antes de aparcar el coche es la ciudad de Erfoud, antiguo conjunto de muchas aldeas, pequeña, ubicada en un oasis natural. Aunque en apariencia no es nada fuera de lo común, su autenticidad hace de este sitio un gran muestrario de la esencia marroquí. Es considerada la tierra de los fósiles y minerales, por lo que si disponemos de tiempo haremos una parada para ojear y curiosear un poquito sobre el tema o visitar alguna manufactura de mármol donde podemos conocer de cerca el proceso de elaboración del mármol.

Y ahora sí, llegamos a Merzouga. Aquí os espera una acogedora bienvenida, como es típico en estas tierras, hasta que dejéis vuestros enseres en el hotel y dediquéis el tiempo restante a lo que os pida el cuerpo. Os recomendamos descansar, porque mañana va a ser un día bastante intenso también, ¡que no se diga!

Día 5

Merzouga y desierto de Erg Chebbi

A primera hora de la mañana y después de un buen desayuno, comenzamos nuestra experiencia por el marruecos sahariano visitando Merzouga, un pueblecito que se encuentra solo a 50 kilómetros de la frontera con Argelia, siendo el pueblo más conocido de Erg Chebbi. Daremos un paseo mañanero caminando por el Oasis de las Palmeras, donde hay cultivos y puedes encontrar a sus habitantes haciendo diferentes labores. También pasaremos por la avenida principal, repleta de puestos, tiendas típicas y conocer el ambiente que se vive entre la población.

Después continuaremos hacia el pueblo de Khamelia. Esta población pasaría desapercibida sino fuera por su música gnawa. Este pueblo en particular, fue fundado por los gnawa, donde se celebra anualmente el Sadaka, el principal festival del mundo de este tipo de música, que conmemora la liberación de la esclavitud. Tendréis la oportunidad de ver un concierto en directo de una de las cofradías y entender un poquito mejor el significado de estos ritmos.

Tras el breve recorrido por esta inmersión cultural, volveremos hacia Merzouga donde os estará esperando vuestro guía con los respectivos dromedarios que os acompañarán en vuestra ruta atravesando el desierto Erg Chebbi. Y ahora te preguntarás: ¿qué es Erg Chebbi?; pues “Erg” es algo así como “región arenosa perteneciente al desierto”. Bueno, pues esta región arenosa es la única del Sáhara en todo el país magrebí.

Desde nuestro punto de vista, es uno de los paisajes más impactantes por su inmensidad visual. Vuestra meta esta noche será un campamento de jaimas donde cenaréis, pasaréis la noche y disfrutaréis de un cielo que probablemente presencies por primera vez. Después de la cena también habrá un pequeño momento donde conoceréis el ritmo improvisado de los tambores bereberes, para que conozcáis un poquito más de esta cultura, alrededor de un fuego acogedor donde también podréis intercambiar experiencias con vuestros anfitriones. Y de esta guisa se termina la noche, con “la barriga llena y el corazón contento”, como dicen por aquí.

Día 6

Trekking en dromedario, Rissani, Gargantas del Todra y Ouarzazate

Hoy toca pegarse un madrugón importante para ver el mejor amanecer de la historia. A lomos de los dromedarios, nos dirigiremos a la duna mejor ubicada para disfrutar de este espectáculo que nos regala la naturaleza. Después regresaremos al hotel para tomar una ducha y desayunar antes de seguir nuestra ruta.

Ya en camino continuaremos explorando la región pasando por Rissani, antigua Sisjlmassa que fue capital de la Región de Tafilalt durante la dinastía alauita e importante ruta comercial transahariana, donde la gente comerciaba oro y otros bienes. A día de hoy Rissani sigue manteniendo su carácter comercial, ya que es el único sitio donde se celebra mercado 3 veces por semana reúniéndose los habitantes de las hasta 300 aldeas cercanas para vender e intercambiar sus productos.

Después de explorar un poco de historia y cultura del sur de Marruecos, haremos pausa para comer y estirar las piernas en las Gargantas del Todra. Aquí aprovecharemos para caminar y conocer sus famosos acantilados, que a ambos lados llegan a estrecharse hasta unos 20 metros de lado a lado.

Siguiendo la carretera de la conocida ruta de las Mil Kasbahs, seguiremos hasta llegar a nuestra meta de hoy, el Valle del Dades, donde pasaremos la noche, cenaremos y nos tomaremos un bienvenido descanso en nuestro alojamiento.

Día 7

Ouarzazate, Ait Ben Haddou y Marrakech

Hoy casi nos despedimos de esta bonita experiencia dirigiéndonos hacia Marrakech. No sin antes, desayunar como está mandao. Exploraremos este maravilloso entorno para conocer más de cerca qué naturaleza se esconde en el sur de Marruecos, tomar unas fotografías, respirar un poquito y después seguir la marcha hacia Ouarzazate.

¿Qué es Ouarzazate? Pues quizá te suene por ser el Hollywood de Marruecos. Ha sido escenario de películas conocidas mundialmente como Gladiator o la última serie que ha tenido enganchado a medio mundo, Game of Thrones.

Seguiremos todavía por la carretera que sigue la ruta de las Mil Kasbahs. El paisaje que nos vamos a encontrar no deja indiferente a nadie: alfombras de palmerales y valles decorados con kasbahs de todo tipo dispersas por todo el terreno. Es un circuito que te mete de lleno a conocer la forma de vida del pueblo bereber, quienes habitaban el país antes de la colonización árabe. Después haremos stop para comer en uno de los kasares, en Ait Ben Haddou. Un Ksar (conjunto de kasbahs) rodeado de vegetación y cultivos, patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1987.

Ait Ben Haddou es sin ninguna, ninguna, ninguna duda, de los paisajes más característicos y particulares de Marruecos. Es el Ksar más conocido del país. Fue diseñado para que la vida de los cultivos y verdales fuera próspera junto a los ríos. Por su ubicación geográfica fue una ciudad en expansión que alojaba a miles de personas. Contaba con plazas, mezquitas, posadas, cementerios… pero cuando las rutas de caravanas comerciales fueron decreciendo, sus habitantes abandonaban el lugar en búsqueda de otro que les permitiese prosperar.

Se esperaba que este kasar fuera pasto de arena, pero la UNESCO ha contribuido a su buen estado de conservación y hoy día también es conocido por ser escenario de películas mundialmente conocidas como Gladiator o la última serie que ha tenido enganchado a medio mundo, Game of Thrones.

Cuando terminemos seguiremos el trayecto atravesando el Atlas por el conocido paso de montaña Tizi n Tichka, el más alto del norte de África, hasta llegar a nuestra meta final: la ciudad roja de Marruecos, Marrakech.

Día 8

Marrakech y aeropuerto

Hoy amanecemos en la ciudad roja, llamada así por el tono rojizo que mantienen sus construcciones y edificios. Es considerada la ciudad más cosmopolita y centro cultural de todo Marruecos, además de elegida como primer destino turístico del país. El ritmo de vida en esta ciudad es muy frenético y desenvolverse es toda una hazaña, la cantidad de personas que pasa por la gran plaza de Marrakech, Jamaa el Fna, es la más grande del país y una de las plazas más concurridas de África y del mundo, representa el Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO que acoge un sinfín de espectáculos

A nivel demográfico esta ciudad está dividida en dos partes: el centro y la ciudad nueva, además se administran y gobiernan de formas distintas. Por supuesto esto le da una diversidad de barrios por los que es aconsejable perderse. Así que después de visitar los enclaves más turísticos, al terminar podréis disfrutar de tiempo libre para conocer la ciudad a vuestro gusto y ocupar vuestro tiempo como queráis.

Ahora sí que sí, hemos llegado al fin. Así que después del paseo matutino quedaremos para llevaros al aeropuerto y despedirnos de estos días en los que hemos compartido grandes experiencias. Esperamos que cada experiencia siempre sea un “hasta pronto”. Feliz vuelta y ¡gracias por compartir con nosotros!

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